pan am 103

pan am 103

viernes, 26 de febrero de 2016

DESASTRE EN LA NIEBLA: LA MAÑANA EN QUE EL VUELO 103 DE YETI AIRLINES SE ESTRELLÓ.

La aeronave siniestrada (Planespotters.net).

Hoy vamos a ver un accidente ocurrido en horas de la mañana en el que, hoy por hoy, se encuentra considerado como el aeropuerto más peligroso del mundo, el de Lukla, en Nepal.


Antes vamos a hacer un poco de historia, el aeropuerto de Lukla (hoy aeropuerto Tenzing-Hillary desde Enero de 2008) apareció en un documental televisivo del canal History Channel llamado Los Aeropuertos Mas Extremos del Mundo y se transmitió en 2010, quedando en el primer lugar dentro de un conteo de 10 campos aéreos, y no es para menos, veamos por qué:


---Su única pista tiene sólo 527 metros de largo.

---Se halla a unos 2850 metros sobre el nivel del mar.

---La pista se halla empinada con un gradiente de 12°.

---En consecuencia, los despegues se hacen cuesta abajo para aprovechar la caída empinada, los aterrizajes se hacen cuesta arriba por la misma razón.

---Únicamente pueden llegar aeronaves de turbohélice y helicópteros de todo tipo.

---No es posible hacer maniobra TOGA, o aterrizan... o se matan (claro está que si se tiene suficiente combustible y no pueden descender las aeronaves se regresan a Kathmandú).

---La parte baja de la pista termina en un acantilado horrible, la parte alta termina en un sólido muro.

---Sólo se puede volar de las 06:30 a las 15:30 horas, siempre y cuando las condiciones meteorológicas así lo permitan.

---Por esa misma razón y dada la altura a la que se encuentra ubicado, rodeado de agrestes montañas, casi siempre hay niebla, en estos casos los vuelos simplemente no llegan y deben regresar a Kathmandú.

---El aeropuerto carece de radar y de sistemas de aterrizaje asistido tipo ILS, únicamente tiene radio.

---No cualquier piloto aterriza allí, se debe tener licencia especial y un entrenamiento específico.


Peor, imposible...


Sin embargo es popular entre los excursionistas que quieren hacer el ascenso al techo del mundo, el imponente Monte Everest, aunque se cuentan historias acerca del miedo que produce la forma de llegar de las aeronaves de turbohélice, pues luego de ver montañas y más montañas durante poco mas de 40 minutos desde Kathmandú se dice que los pilotos ejecutan una escalofriante caída y de pronto aparecen casas aquí y allá para luego casi aporrear la pista y tener la sensación de estar subiendo una calle cuesta arriba y frenar bruscamente.


Ya repuestos de la impresión, los pasajeros extranjeros se enteran que llegaron a Lukla, pueblecillo perdido entre las montañas y punto de partida de las excursiones al Everest, les llama la atención que los pasajeros nepalíes que vuelan con cierta regularidad permanezcan impávidos al aterrizar así mientras los demás pasajeros extranjeros se mueren de miedo.


Desde que este campo aéreo de abrió en la década de los 60s ha tenido de tanto en tanto accidentes aéreos casi siempre con consecuencias fatales, y hoy veremos uno en donde sólo uno salió con vida.


Hoy nos situamos en el aeropuerto de Lukla, es el 8 de Octubre de 2008, es de mañana, acercándose en maniobras de aproximación final y aterrizaje viene una pequeña aeronave bimotor de turbohélice.


Se trata de un De Havilland Canada DHC-6 Twin Otter 300, operado por Yeti Airlines, empresa establecida en 1998, cubre el vuelo 103 procedente del aeropuerto internacional Tribhuvan, en Kathmandú, capital de Nepal; la aeronave tiene por matrícula la 9N-AFE, lleva a bordo 16 pasajeros, la tripulación de 3 está encabezada por:


---El capitán Surendra Kunwar.

---El primer oficial Bikash Pant.

---Y la aeromoza Sunita Shrestha.


El capitán ya ha avisado a todos que se preparen para aterrizar, Lukla ya se ha comunicado con el vuelo 103 y les menciona que el clima es pesado, hay nubes muy bajas y niebla, deben decidir entre si seguir la maniobra de aterrizaje o volver a Kathmandú.


Como las aproximaciones se hacen según las reglas de VFR (por Visual Flight Rules o Reglas de Vuelo Visual), los pilotos deciden seguir el acercamiento asistiendose con los altímetros para estar más seguros, el manchón neblinoso es muy pesado, ni siquiera pueden ver hacia adelante, por no decir que tampoco ven hacia abajo.


Los pilotos ajustan las alas y la velocidad de la aeronave, al mismo tiempo ajustan el ángulo de ataque hacia arriba, pues como la pista al aterrizar va cuesta arriba, deben hacer que el aparato se pose en los trenes principales y frenarse de inmediato o de lo contrario se estrellarían con el muro del final.


El aparato sigue descendiendo, nadie puede ver nada a causa de la niebla, en cabina, los pilotos se mantienen atentos, ya pronto tocarían tierra, desde la pequeña torre de control de Lukla los operadores escuchaban el rugido de los motores de la aeronave que se aproximaba y que no podían ver, al igual que los habitantes del pueblo acostumbrados de tiempo atrás al sonido de aviones y helicópteros que llegan y salen, cuando de pronto.


Impacto, un crestón rocoso frenó de golpe a la aeronave, todo el mundo se sorprendió al escuchar el estruendo y corrieron al inicio de la pista intentando ayudar en lo posible, dentro de la terminal aérea los oficiales de policía nepalí reaccionaron de inmediato pero no contaban con los elementos suficientes para combatir de manera efectiva el incendio, y también allí se encontraba un turista alemán que tomaba un vídeo de cómo estaban las condiciones meteorológicas en ese momento, el vídeo muestra la pesada niebla y en el audio de capta el sonido de los motores de la aeronave que se acercaba, de pronto y en medio de ese velo blancuzco se alcanza a ver un fogonazo violento, es el momento del choque.



Este es el video del turista que captó el accidente, nótese cómo estaba de pesada la niebla el día de la tragedia.


Los lugareños y policías nepalíes hallaron que sólo hubo un superviviente, era el capitán Kunwar, que de alguna manera salió disparado de la cabina de mandos al momento del choque, estaba malherido, de los demás ocupantes sólo se comprobó que nadie quedó vivo, 18 personas se habían ido de un plumazo.

Tres aspectos de los escombros tras la tragedia (www.baaa-acro.com).


Las autoridades nepalíes se concentran en descubrir las causas del accidente, y la primera pista a seguir vino del lugar mismo del impacto, los pilotos habían hecho acercamiento más bajos y más a la izquierda de lo que debían, esto llevó a los investigadores a pensar que los pilotos no estaban conscientes de hacia dónde se encontraban estando en medio de la niebla, ahora había qué saber por qué en esas condiciones siguieron la maniobra de aterrizase, y para esto deben interrogar al único superviviente, el capitán Kunwar.


Desde su lecho de hospital Kunwar declara lo que sabe, que esa mañana había mucha niebla espesa, que platicaron entre él y el primer oficial Pant tratando de decidir si seguían adelante o trataban de aterrizar así, y toman una fatídica decisión, seguir adelante, por eso configuran el aparato para aterrizar, tratando de seguir reglas de vuelo visuales VFR con el riesgo que eso conllevaba al no poder ver la pista, de alguna manera acabaron desviándose a la izquierda en relación a su llegada, bajaron de más la aeronave y chocaron, en todo momento tanto el capitán Kunwar como el primer oficial Pant creyeron que estaban en la senda de planeo correcta, cuando el aeropuerto de Lukla no cuenta con sistemas asistidos de aterrizaje por medio de ILS, lo conducente ante esa situación de clima adverso era emprender el regreso a Kathmandú.

El capitán Surendra Kunwar en el hospital (Getty Images).


Y no lo hicieron...


Los investigadores no tuvieron qué buscar mucho para determinar que ambos pilotos perdieron por completo conciencia de lo que debían hacer para proteger a sus pasajeros, sufrieron lo que en el medio se conoce como desorientación espacial, pues al estar dentro de una densa niebla y no tener referencias visuales no supieron a dónde se dirigían.


El reporte (hasta ahora porque aún se mantiene abierto el caso) da como resultado un accidente tipo CFIT (por Vuelo Controlado a Terreno o Controlled Flight Into Terrain), y realmente es deplorable la actitud de los pilotos de seguir el vuelo en condiciones tan adversas y no haber optado por lo seguro y regresar a Kathmandú.


Las nacionalidades de las víctimas quedaron así:


---12 de Alemania.

---2 de Australia.

---4 de Nepal, entre ellos el primer oficial y la asistente de vuelo.


Y el único superviviente, el capitán Kunwar, queda no solo con sus heridas físicas, sino con un enorme peso en la consciencia porque muy dentro de sí él sabía que, siendo el piloto al mando, con su decisión de seguir adelante condenó a muerte a 18 personas, y le colgó al aeropuerto de Lukla otro accidente mas a su récord de ser el mas peligroso del mundo.




Fuentes:

---Wikipedia en inglés.

---Aviation Safety Network.

---www.baaa-acro.com

---Telegraph & Argus.

---www.nepalboard.de


Video:

---Youtube.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario